lunes, 14 de febrero de 2011

An education

El otro día vi una película que se llama "An education". No recuerdo el director, es de hace un par de años. Sí conozco al guionista, el escritor Nick Hornby (Alta fidelidad, Juliet desnuda...)que adaptó unos textos biográficos de una escritora inglesa para dar cuerpo a este largo.
La historia narra el último curso de una adolescente de un barrio periférico en el Londres de 1961 antes de entrar en la universidad. Una historia gris porque Gran Bretaña era gris desde la postguerra hasta los 60, cosa que no ocurre al otro lado del charco, donde películas como American Graffiti, ambientada en el mismo curso, nos dan la idea de una sociedad alegre, más libre y libertina, exportando el "american way of life" que hacía salibar a los europeos.
En Gran Bretaña estaba todo estereotipado. El hijo del mayordomo era... mayordomo, y que no se le ocurriera pensar en otra cosa. Y si en la película el padre de la protagonista era un humilde funcionario que quiere que su hija vaya a Oxford, pues la niña se tiene que dedicar a sacar las notas suficientes para ir allí.
Y claro, se desata la rebeldía, las ganas de libertad y de querer ser lo que uno quiera, no lo que le dicten (si no, la película no tendría gracia y seguiría siendo gris). Cenar después de las seis, ir a un club de jazz, soñar con París...
Un buen ejemplo para que tomen nota los bachilleres que no es que cenen tarde ahora, es que ni cenan en casa, que frecuentan garitos hasta la hora del cierre y que París para ellos está a la vuelta de la esquina y lo tienen cuando quieran. Tienen esa libertad y añoran la universidad, porque tanta libertad les quita tiempo para llegar a sacar la nota deseada.
(Esto me lo tenían que haber explicado a mí hace veinte años, ¿no?)