Recuerdo escuchar una y otra vez el Piknik Caleidoscópico de Los Negativos en mi habitación. Me lo grabó en una cinta Javi, El Mod. En aquellos años en los que ya había dejado atrás, aunque les miraba de reojo, a Elvis o a Berry, y el mundo psicodélico de Blues Magoos por un lado, o de Creation por otro daban color a la música que escuchaba.
Descubrimos que también en nuestra lengua se hacían discos de culto, que existían Imposibles, Búhos, Stupid Baboons... pero que una década antes estuvieron los maestros, Los Negativos.
Hoy nos ha dejado su líder, Alfredo Calonge, y uno no sabe si allí donde ha ido las chicas llevan pantis de color azul, si escuchará discos de los Seeds, ¿estará en una habitación realmente pequeña? o viajando hacia el norte otra vez; puede que haya ido a la Madalena Lisérgica, a ver al Mágico Víctor... no sé. Nos queda la pasión que le acompañó en cada proyecto, tanto en Los Negativos como en el último, Canary Sect.
Yo lo que tengo claro es que me voy con él, de Piknik...